Falsas ilusiones

El ex-presidente del COI, Juan Antonio Samaranch, quien sabe más por viejo que por zorro, dejó dicho entre sus íntimos que aunque Madrid se esforzara por obtener los Juegos Olímpicos de 2012, la candidatura de París llevaba todos los números para salir elegida. Mañana se conocerá en Singapur el resultado de una eliminatoria de la que se supone caerán en primer asalto las ciudades de Moscú y Nueva York, luego quizás Londres y tras ello dilucidarse todo entre franceses y españoles. Aunque en los últimos días Londres y París la hayan emprendido a gorrazos entre ellos -ya se sabe el amor que se tienen ingleses y franceses desde época ancestral y no hay más que leer lo dicho últimamente por el presidente galo al respecto- no parece que a río revuelto pesque la candidatura madrileña el ansiado antorchado. Para colmo, alguien ha querido hacer un inmenso favor a Madrid 2012 y ha colado en la prensa norteamericana una abierta adhesión del molt honorable president de la Generalitat, Pasqual Maragall a la apuesta neoyorkina. ¿Hay quien dé más?