El buen dato

Leo el buen dato estadístico del Departamento de Justicia que no por serlo deja de ser menos descorazonador. En Estados Unidos disminuyó el número de reos ejecutados o sentenciados a la pena de muerte durante el 2004.
En el informe anual difundido por la Oficina de Estadísticas de la Secretaría de Justicia se señala que en 2004 doce de los 50 estados de EEUU ejecutaron a 59 prisioneros -entre ellos tres hispanos-, seis menos que en 2003.
En el año de la investigación, 125 reclusos, incluidas cinco mujeres, fueron condenadas a la pena de muerte por asesinato, la cifra más baja en 32 años.
El informe pone de relieve que el número de reos condenados a la máxima pena disminuyó por cuarto año consecutivo en el 2004.
Las autoridades de Justicia consideran que el descenso de las cifras puede tener varios motivos, entre ellos, la conmutación de la pena, menos sentencias de esta clase recomendadas por los jurados y las leyes más drásticas.
En la actualidad, las leyes de 37 de los 38 estados de EEUU que mantienen la pena capital permiten que los jurados consideren cadena perpetua sin derecho a libertad condicional como alternativa a la máxima sentencia.
Hasta el 31 de diciembre pasado había en Estados Unidos un total de 3.315 reclusos condenados a la pena de muerte, frente a los 3.378 de 2003.
El año pasado, Texas ocupó el primer lugar en número de ejecuciones, con 23 del total de las 59 llevadas a cabo en todo EEUU en ese período.
De los 59 ejecutados, 36 eran blancos, 19 negros, tres hispanos y uno asiático.
Uno de ellos fue ejecutado en la silla eléctrica y el resto por medio de una inyección letal.
La estadísticas destacan que en lo que va del 2005 han sido ejecutados 49 reos en 13 estados.
Y las negras cifras seguirán ensombreciendo el panorama ... "Toda reforma impuesta por la violencia no corregirá nada el mal: el buen juicio no necesita de la violencia". Lo dijo Tolstoi hace muchos años. Y qué poco hemos aprendido.